viernes, 13 de enero de 2012

Nooo puede ser

Me empeño en detenerte recopilando recuerdos. Quiero recordar tu mano, la sensación de tus manos sobre mi cuerpo.
Recuerdo la sensación de tu mano enferma cuando yo metía la mia a través de tus cobijas de tu cama de enfermo.
¿Qué pensabas Knín?.. ¿Qué sentías mi vida?.. ¿Por qué no me platicaste tu angustia?
La más grande y brutal ausencia de mi vida. ¿Cómo sin ti?
11 meses y 5 días a partir de que nos enteramos de la enfermedad. ¿Qué hubiera pasado si lo hubiéramos sabido?.. ¿Habría apreciado más tu necesaria presencia en mi vida?.... Seguro hubiéramos sufrido más, mucho más.
Nos mantuvo la esperanza. Pensar que vencías las enfermedad, que la mantenías a raya, que todo estaba bajo control. Sentir que pudiste “hacer planes”… Cómo te gustó tener esa sensación.
Y por algunos días, poquitos, muy poquitos, volvimos a vivir plenos de esperanza, a hacer planes, a alejar de nuestras conversaciones la enfermedad, aunque esto último realmente pocas veces. Yo creo que no hubo un solo día en el que no se hablara de lo que te estaba sucediendo, aunque nunca nos atrevimos a confesar nuestros temores... yo por lo menos no.
A vivir, dijo el Dr., “..ya hicieron todo lo que estaba a su alcance, todo lo que pudieron, la mejor medicina, la mejor atención, una magnifíca respuesta, váyanse a vivir..”. Y eso creímos…… Un viaje desordenado y escasamente planeado como todos los nuestros, Quiero ir al sur de Italia, a los lagos, que el italiano nos ayude a escoger una ruta. No, mejor a Praga, que Andrés no conoce. Va Andrés, qué maravilla, tu hijo retrato, tu hijo reflejo, tu hijo junto al cual piensas que vas a vivir los sucesos políticos del 2012, un enorme banquete que entonces no sabemos que te vas a perder. Tu hijo que ahora se siente desolado y que caminaba firme en ese terreno porque se sabía guiado por su padre, un viejo lobo de la política, un experto, un triunfador, un entendedor de todos los tejemanejes de la política mexicana, un apasionado….. un mil cosas, interminables, nada te define.
Mis remordimientos….. todos, ¿por qué no me quedé contigo hasta que conseguiste amanecer el 24?...... POR QUÉ NO TE ACOMPAÑE EN TU AGONIA…. ES QUE NO ME LO PERDONO. ¿EN QUE MOMENTO PERDISTE EL CONOCIMIENTO? ¿EN QUE MOMENTO TE DISTE CUENTA DE QUE ESTABAS SOLO EN UN LUGAR QUE NO RECONOCÍAS COMO TU CASA Y ANTE UNA PERSONA QUE NADA TENÍA QUE VER CONTIGO Y SÓLO SE OCUPABA DE TUS ÚLTIMAS E ÍNFIMAS NECESIDADES….? POR QU’É POR QUÉ POR QUÉ… YO EN LA QUE TUS ÚLTIMOS DÍAS IDENTIFICASTE COMO “TU CAMA”, Y NO COMO LA TUYA.
Pedro tu hermano, hoy que desayunamos juntos en el hotel, compartiendo nuestra pena, me dio un libro que alguien le dio a él. Encuentro este pasaje que describe perfectamente mi sentir.
"Desde que nos encontramos no nos habíamos separado ni por un momento.
Era un pacto sin palabras.
Nos deteníamos si el otro se detenía.
Acelerábamos si el otro apuraba el paso.
Tomábamos juntos el desvío si cualquiera de los dos decidía hacerlo...
Y ahora ha desaparecido.
De repente no está a la vista.
Me asomo infructuosamente observando el camino hacia ambos lados.
..Éramos como dos personas guiadas por un mnismo deseo, como dos individuos con un único intelecto, como dos sers habitando en un solo cuerpo.
Y de repente,
la soledad, 
el silencio
el desconcierto.
... ¿Y si hubiera decidido no seguir conmigo?
Después de un tiempo me doy cuenta de que por mucho que lo espere nunca volverá.
Así me siento, divido, perdido, destrozado".
Jorge Bucay, El Camino de las Lagrimas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario